“Nada es más suave y al mismo tiempo tan fuerte como el agua, que fluye firme y lentamente, con la sabiduría de tener el mismo destino del hombre: seguir adelante”.
Anónimo
Hace 14 años era un sueño y una ilusión desarrollar un congreso para los profesionales de la belleza, el que estábamos seguros ayudaría a engrandecer esta profesión. Ese río de ilusión removió nuestras ideas con tanta fuerza que hizo inundar al gremio por esa misma pasión. Pasado este tiempo, podemos decir que hoy, gracias al Congreso de Belleza Total, hay mejores profesionales, más emprendedurismo, así como nuevos sueños que se han forjado a partir de esta aventura.
Por ello, he querido compartir con ustedes mis queridos lectores, las experiencias de vida que provocan una reacción a las diferentes circunstancias, para que nada atrape nuestra libertad y nuestros sueños. Hoy deseo invitarlos a tomar unos minutos para entrar en su interior y descubrir qué sueños los mueven, los apasionan y aún no los han realizado.
En esa reflexión podrían aparecer anhelos bloqueados y proyectos paralizados por el miedo, los que debemos retomar con esperanza y alegría. Es tiempo de trabajar en nosotros mismos, para develar aquello que nos estanca y así nuestro proyecto de vida siga siendo libre.
Aunque es un reto, la invitación es a transportarnos a una dimensión de alegría, de equilibro, de autoaceptación, de esperanza y de amor, para que la creatividad fluya, la innovación se haga presente y la pasión sea el motor que nos permita trasladar los sueños a la realidad. Y para ello necesitamos adoptar una actitud positiva, optimista, comprometida y, sobre todo, una que vele porque las acciones que emprendamos sean en beneficio del bien común y del entorno, para que el universo en pleno mantenga su armonía. Solo así podremos decir gracias por todo y por nada. ¡Que el río de su vida se escuche como una melodiosa orquesta que transmita paz!
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